Puertas correderas como separadores de espacios
Lo que durante mucho tiempo ha sido habitual en grandes salones y lugares para eventos, ahora también se está abriendo camino en cada vez más espacios habitables: habitaciones flexiblemente personalizables gracias a las puertas correderas como separadores de espacios.
Las puertas correderas crean milagros de espacio en cualquier hogar, por laberíntico que sea: con las puertas correderas, los nichos desordenados se convierten en elegantes y prácticos muebles altos, un trastero se convierte en un despacho en casa e incluso un pequeño aseo de invitados tiene su sitio. Hasta aquí, todo conocido.
Puertas correderas como separadores de espacios
Separar partes de una habitación con una puerta corredera no sólo ahorra espacio, sino que también hace maravillas en habitaciones grandes. Cuando se trata de las exigencias de la vida moderna, apenas hay nada que armonice tanto la flexibilidad con la funcionalidad y el bienestar como las puertas correderas como separadores de espacios, preferiblemente de cristal.
Muchos pisos tienen muchos metros cuadrados, pero pocas habitaciones. Sobre todo en tiempos de trabajar desde casa y de cierres frecuentes de guarderías y colegios, las habitaciones de retiro y la organización ideal del espacio disponible son muy importantes para el bienestar. Puede ser necesaria una sala de juegos o de estudio, o un despacho en casa. Si es posible, estas habitaciones deben estar protegidas de las influencias visuales y acústicas, de forma que las conferencias y la preparación del trabajo en clase puedan llevarse a cabo sin molestias.
Levantar una pared es una opción, pero priva a ambas habitaciones de luz y espacio. Esto reduce considerablemente la sensación de bienestar. Además, esta solución es cara y poco flexible.
En cambio, las puertas correderas de suelo a techo son la solución ideal. Pueden abrirse o cerrarse según las necesidades y no privan a la habitación de luz ni de aire. Si quiere mantener la ilusión de un espacio amplio incluso cuando el tabique está cerrado, una puerta corredera de cristal transparente es la mejor opción.
Puede utilizar otros materiales para proporcionar más intimidad y crear cierto ambiente al mismo tiempo: Por ejemplo, una puerta corredera de cristal esmerilado con bordes de aluminio negro evoca inmediatamente la elegancia chic de los pabellones asiáticos. En cambio, una puerta corredera con elementos decorativos naturales resulta alegre y relajante al mismo tiempo.
Otro posible uso de las puertas correderas como separadores de espacios es sustituir una puerta batiente convencional por una puerta corredera. El efecto es sorprendente: aunque la distribución de la habitación no ha cambiado, las dos habitaciones parecen más una sola unidad que con una puerta batiente. De este modo, toda la vivienda parece más grande.
Puertas correderas Griffwerk para una óptima división de espacios
Las puertas correderas de cristal de Griffwerk amplían visualmente las habitaciones pequeñas y permiten que las habitaciones grandes se inunden de luz y amplitud. La puerta corredera de cristal de varias hojas PLANEO AIR divide sus habitaciones de forma flexible y con un estilo moderno.
La versión PLANEO AIR SILENT de cierre hermético garantiza la paz y la tranquilidad cuando se necesitan y, a continuación, permite que vuelva a entrar la vida. La versión esmerilada también ofrece privacidad visual cuando es necesario y deja entrar suficiente luz. Otra ventaja del separador de ambientes con cierre hermético: con la puerta cerrada no sólo se evitan los ruidos, sino también los olores.
Las puertas correderas de cristal transparente separadoras de ambientes en calidad BLANCO PURO mantienen la ilusión de habitaciones grandes. Si desea acentuar la ligereza de mucho espacio y luz con elementos de diseño, Griffwerk dispone de una gran selección de variantes de cristal, desde cristal satinado hasta cristal gris, elementos florales, líneas minimalistas, diseños 3D y mucho más.
Montadas sobre sencillos rieles o en un marco envolvente, todas las variantes pueden combinarse con elegantes molduras tirador, varillas o conchas.
